Jasón recorrió el Mar de Mármara en su nave Argos con sus cincuenta argonautas y pasó por las terribles piedras móviles del Bosforo para llegar a la Cólquide en las costas del Mar Negro.
El mar de Mármara era el Propóntide griego que en el Bósforo entra en contacto con el Ponto Euxino - el Mar Negro- que baña las costas de Rusia, Armenia, Azerbaiyán, Belarrús, Georgia, la República de Moldova, Turquía y Ucrania
No solo hoy, sino que desde la antiguedad ha sido el Mar Negro un mar fascinante por sus características especiales, ya que es el mayor depósito planetario de ácido sulfhídrico. A doscientos metros de la superficie no hay oxígeno ni vida.
Pero en él vierten sus aguas cinco grandes ríos europeos: el Kubán, el Don, el Dniéper, el Dniéster y, sobre todo, el Danubio. En el Mediterráneo sólo desembocan tres grandes ríos: el Ródano, el Nilo y el Po.
El Mar Negro es la masa de agua muerta más grande del mundo, pero su superficie y sus orillas han estado siempre vivas.
P ruebas científicas recién descubiertas indican que hace más de 7000 años el nivel del Mar Negro aumentó de manera impresionante. Más de 150 metros y 100 000 km2 de tierra quedaron sumergidos bajo el agua en cuestión de meses.
No se sabe si fue, en realidad, una catástrofe natural súbita, o si ocurrió de manera gradual a medida que iba aumentando el nivel del mar en el mundo , pero la entrada de las aguas del Mediterráneo en el Estrecho del Bosforo transformó el Mar Negro de un enorme lago salobre en un mar salado.
Debido a una fuerte estratificación, sus aguas saladas, más pesadas, quedaron realmente apresadas debajo del agua dulce aportada por los ríos, lo que impidió cualquier mezcla de importancia.
Las aguas del fondo del mar se tornaron anóxicas (carentes de oxígeno disuelto) y perdieron su capacidad para sustentar la vida.
Sin embargo, en las capas superficiales se desarrolló una rica vida marina.
Los especialistas consideran que el Mar Negro es un medio marino único, que está particularmente expuesto a los efectos de las actividades antropógenas. Este Mar está prácticamente rodeado de tierra. Además del vínculo con el Mar de Azov, interior y poco profundo, su único intercambio de agua con el océano mundial tiene lugar a través del angosto Estrecho del Bosforo.
El Mar Negro encierra la mayor masa de agua permanentemente anóxica del mundo: un 9 0 % del volumen total de 5,37xl05 km', del Mar, carece de oxígeno y es rico en ácido sulfhídrico. Solo la restante capa de 150 metros de espesor de aguas superficiales es capaz de sustentar la vida marina.
Esta subida del Mar Negro durante el Neolítico, convirtiendo el lago en un mar al romperse el dique del Bósfor que separaba lo separaba del mar Egeo. En un principio fue una pequeña corriente de agua salada que fluía a través del valle del Bósforo hacia el lago, pero en poco tiempo ésta se convirtió en un torrente y luego en un diluvio.
Fue tanta la cantidad de agua salada que fluía a través del Bósforo que el nivel del lago subía ventricuatro centrímetros por día y se llenó en tan sólo dos años. Debido a esta inundación, los valles se convirtieron en trampas mortales y las personas que vivían en la periferia del lago se vieron obligadas a evacuar sus hogares y ciudades y trasladarse a terrenos más altos, escapando hacia Europa, India, Mesopotamia, Armenia, Anatolia y Grecia.
Algunos historiadores sostienen que los refugiados que llegaron a Egipto comenzaron la leyenda de la Atlántida.
Todos los habitantes de esta diáspora hablaban un lenguaje similar, indo-europeo, y por ello explican las similitudes existentes entre el sánscrito, el alemán y el latín. Los arqueólogos Ryan y Pitman proponen que la inundación del Mar Negro, la devastación y la posterior diáspora es la base para el relato bíblico del Diluvio Univeral de Noé, que llegaría a través de las leyendas sumerias. Sumer fue uno de los lugares de destino de estas poblaciones neolíticas que debieron abandonar sus tierras por lo que para ellos era una verdadera catástrofe natural: la pérdida bajo las aguas de todo su mundo.
Después, cuando el mar se estabilizó, la zona fue recorrida por hititas, tracios, griegos, persas, cimerios, escitas, romanos, bizantinos, godos, hunos, ávaros, búlgaros, eslavos, varegos, cruzados, venecianos, genoveses, lituanos, polacos, georgianos, tártaros, turcos y rusos
Cimerios
Será durante la Era del Bronce, esa magnífica Edad en la historia de la Humanidad, que se desplomó tras conocer grandes imperios y grandes adelantos científicos y técnicos, cuando aparezcan los cimerios en torno al Mar Negro. Este es el pueblo más antiguo que hasta el momento se haya identificado por su nombre.
Ya los mencionaban Homero por allá por el siglo VIII antes de Cristo, o Herodoto en su “Historia” en el siglo V a.C.
Es en el canto XI de la Odisea donde se incluye por primera vez una descripción del pueblo de los cimerios en el marco del relato de un viaje al mundo de los muertos.
El viaje al mundo de los muertos de Odiseo, la tradicionalmente denominada Nékyia, es uno de los episodios más complejos y apasionantes de la Odisea. El héroe, instado y ayudado por Circe, se dirige a la entrada del Hades, en los confines del Océano, para consultar al difunto Tiresias acerca de su regreso a Ítaca. Allí mantiene emotivos encuentros con momentos de gran intensidad dramática,como el desesperado intento por abrazar a su madre Anticlea o el airado silencio deÁyax.
Debido a esta ambientación de ultratumba, el canto XI de la Odisea gira en torno a la muchedumbre de almas atraída por el ritual nigromántico. Pero se menciona también a unos pobladores vivos, los cimerios, que habitan un territorio en el que la frontera entre la vida y la muerte queda desdibujada. Se trata de un pueblo de características singulares
Los cimerios son un pueblo mítico que habita una ciudad en el extremo del mundo, junto a la entrada del Hades. La niebla los rodea y están sumidos en la más absoluta oscuridad, pues Helios, el sol, no los ilumina en ningún momento de su recorrido cósmico, ni cuando asciende al firmamento al amanecer, ni cuando desciende al atardecer. Los cimerios no están situados en el interior del inframundo sino en sus inmediaciones, y queda de manifiesto que viven, pues se les califica de mortales (βροτοῖσι). Sin embargo, su región reflejala naturaleza del Hades homérico, que se caracteriza por la niebla y la oscuridad, como los propios difuntos declaran ante Odiseo
Los cimerios homéricos pervivirán en la literatura grecolatina.
Esto es en los mitos, pero en la realidad histórica, los cimerios eran uno antigua población indoeuropea del Cáucaso.
En un punto, presionados por los escitas, se movieron hacia el oeste y el sur, extendiéndose hasta el Cercano Oriente, donde finalmente fueron derrotados por los asirios.
De los cimerios los nombres de tres reyes: Teushpa, Tugdamme y Sandakshatra. Especialmente en el tercer nombre debe notarse el fuerte valor indo-iraní (los Kshatrya en India eran los miembros de la casta guerrera).
Los cimerios dieron el primer nombre a Península de Crimea en la antigüedad llamado Cimmeria.
Según Herodoto, los cimerios fueron expulsados de las estepas por los escitas en el siglo VII antes de Cristo; algunos de ellos se establecieron en las costas sur, junto al Mar Negro en la península de Crimea, y se les conoció como Taurianos; mientras que otros se trasladaron en campaña hacia Asia Menor, tomando la capital de Lyidia, Sardis, en el año 652 antes de Cristo.
En el reino de Lyidia se acuñó moneda por primera vez, antes incluso que en China o India.
En términos lingüisticos, dados los nombres de sus líderes e hijos, como “Tygdamme” a quien Herodoto llama “Lygdamis” y su hijo “Sandajsatra”, los expertos piensan que fueron de origen iraní.
Heródoto de Halicarnaso anotó sus observaciones y lo que escuchó al visitar el Mar Mediterráneo y el Mar Negro.
En segundo lugar, los mapas sobre la Antigüedad, donde se observa el “Bósforo cimeriano”
Como las fuentes asirias se refieren a los cimeros como los Ga-mir o Ga-mir-a-a (que puede traducirse como “gente que va y viene”), esto describe su forma de vida nomádica, la cual era natural en un pueblo de jinetes.
En las estepas entre los ríos Prut y Don, se han encontrados restos de los cimerios, quienes eran enterrados con sus arcos y espadas. Esto sugiere que peleaban como arqueros a caballo.
Una de las más preciadas posesiones eran sus vacas, por lo que podemos imaginarnos al ganado migrando junto a los jinetes.
Los cimerios tienen semejanzas arqueológicas con otras culturas de la Edad de Bronce, tales como la cultura nomádica Yamna (3200-2300 AC), que enterraba en kurgans; la cultura de las catacumbas (2800-2200 AC), que hacía una fosa hueca cerca del enterramiento principal; y la cultura Srubna (1800-1000 AC) que tenía casas de madera y un sistema de troncos para los enterramientos. No obstante, se distinguen de los grupos mencionados.
Luego de su estadía en Urartu (el nombre antiguo para Armenia), los cimerios atacaron a Frigia, al oeste de Turquía.
La última mención del pueblo cimerio en la Antigüedad está en una inscripción del 515 AC, en época del Rey Darío, líder de los persas
Después de siglos fue Goethe quien retomó la imagen homérica en su obra”Viaje italiano", identificándose con los cimerios los pueblos del norte sumergidos en las brumas, frente al luminoso Mediterráneo.
Y era cimerio el bárbaro conan nacido de la imaginación del escritor americano del siglo XX Robert E. Howard.
Los escitas fueron un pueblo de origen iraní o mongol. Se cree que, cuando ocuparon las tierras de los cimerios, incorporaron su cultura. Al igual que ellos, los escitas eran nómadas y se movían montados a caballo. Hacían sus enterramientos en kurgans, como el que se encuentra en Alexandropol, Ucrania, que fue investigado de 1852-1856.
Sergei Rudenko (1865-1969), el arqueólogo y antropólogo ruso que investigó en Siberia (1947-1954), tiene a su haber un hallazgo arqueológico importantísimo en la meseta Ukok, en los montes Altai. A pesar de los parecidos de la cultura escita con la hallado en dicha área, Rudenko identificó el pueblo estudiado como Pazyryk, el cual se desarrolló entre los siglos VII-III AC. El lugar arqueológico que investigó Rudenko está cerca de la frontera de Rusia con Kazakistán y República Popular China. Pero, como era un pueblo ecuestre, seguramente tuvieron contactos con otras zonas más occidentales. Gracias al clima del lugar, que produce un suelo congelado (permafrost), se conservaron cadáveres con piel intacta, en la que se pueden ver tatuajes. También se hallaron alfombras, telas, carruajes y adornos en oro.
Los griegos los consideraban descendencia de Heracles y el monstruo serpentino Equidna. Su origen histórico también se remonta a la familia iraní. Los escitas se llamaban a sí mismos Scoloti (Skuta o Saka), en honor al rey Skules. En el nombre nacional reconocemos la raíz indoeuropea * skeud: "throw", "pull" (compárese con el inglés Disparar), nombre propio de un pueblo de tiro al arco y cazadores.
Volviendo al mito, nacieron tres hijos de Heracles y Equidna y el héroe los sometió al prueba de dibujar el arco. El tercer hijo ganó la prueba y se convirtió en el primer rey de Escitia.
Otro mito cuenta que el primer hombre nacido en Scythia fue Targitao, hijo de Zeus y el río Boristene. Él también tuvo tres hijos. Un día descendieron del cielo tres dones divinos: uno taza, A 'hacha doble y un arado. También en este caso el tercer hijo logró tomar posesión de los dones y del reino. Es evidente en estos mitos esquema de la tripartición indoeuropea Dumézilian. La copa es símbolo de la función sacerdotal y de la ciencia divina, la doble hacha hace referencia a la función guerrera y el arad a la fertilidad/riqueza garantizada por la tercera función social. La Copa de los Escitas es la antecesora de lo que en la Edad Media Celta-Germánica será la Copa de Grial.
Físicamente, los escitas eran típicamente europeos, como lo confirmaron los estudios mitocondriales de 2002: fuerte la similitud con los habitantes actuales de Europa del Este (con la propagación del haplogrupo R1a1-M17). Según un estudio genético de 2009, los escitas tenían ojos azules o verdes, piel y cabello claros. Los soberanos fueron elegidos en base a criterios eugenésicos, por lo que los cuerpos exhumados de los reyes tenían permanentemente 1,80 m de altura, sensiblemente superior a la media del clan.
Procedentes de la zona entre el mar Caspio y las montañas de Altai, cerca de Siberia, los escitas se establecieron en la vasta zona entre el Don y el Danubio en el siglo X a. De esa zona expulsaron a los cimerios que anteriormente estaban estacionados allí. A medida que avanzaban los escitas, los cimerios huyeron.
Una subdivisión interna de la etnia atestiguada por los griegos se encontraba entre los escitas de Occidente, más dedicados a la agricultura, y los de Oriente, orgullosos cazadores nómadas.
En su fase de furia expansionista, los escitas atravesaron Oriente Medio, sometieron a asirios y medos y entraron en Palestina en el año 700 a.
El imperio del Medio Oriente de los escitas duró treinta años.
Narra Herodoto que los escitas saquearon la ciudad de Ascalon en Siria y saquearon el santuario de Afrodita Urania. La Divinidad indignada por el insulto castigó a los saqueadores y sus descendientes con una "enfermedad femenina": los volvió impotentes y andróginos: sus hijos pasaron a formar la clase de adivinos andróginos de los Enarei.
Empujados hacia el norte por una coalición de medos y babilonios, los escitas sufrieron la invasión persa de Darío I.
Mientras tanto, los sármatas avanzaron desde el este y empujaron a los escitas a avanzar hacia el oeste. El reino escita fue definitivamente extinguido por los godos en el siglo II d.C.
Heródoto atestigua a los escitas una extraordinaria fascinación por su, metal de valor mágico: el oro era la base del poder, era un puente entre lo humano y lo divino. El rey era el guardián del oro sagrado. Otro elemento fundamental en la vida de estos bárbaros fue -por consideraciones obvias- el caballo: compañero en la vida y en el más allá. De su leche obtenían una bebida particular: el kumis.
Cerca del ocaso del imperio zarista y la revolución bolchevique, un Renacimiento del mito escita. El feroz bárbaro escita de Oriente fue interpretado como una figura libre e indomable frente al sedentario burgués occidentalizado. Del escita se convirtió en el arquetipo de la profunda identidad rusa. La "suite escita" de Sergej Sergeevich Prokofiev data de 1914.
La tercera población de la familia iraní-indoeuropea que se alternó en la vasta región al oeste del Cáucaso en el Mar Negro fue la de sármatas.
Estaban divididos en cuatro grandes tribus, la más importante de las cuales era la de los Alani.
El movimiento original de los alanos fue también de este a oeste: desde las regiones del sur de los Urales (donde se enfrentaron con bactrianos y partos), los sármatas se proyectaron hacia el sur de la Rusia europea, poniendo fin al dominio de los escitas sobre la región. .
Los romanos los percibían principalmente como criadores de caballos grandes.
Con el Imperio los sármatas mantuvieron relaciones periódicas de paz y guerra: del lado de los dacios en tiempos de Trajano sufrieron una clara derrota en el momento de máxima expansión de Roma. Pero fue el colapso de la ciudad lo que expuso a los sármatas a los movimientos de los pueblos del norte y del este: primero fueron dominados por los godos y luego por los hunos.
Pero grupos consistentes de Alans fueron incorporado al imperio y jugó a su favor. Marco Aurelio ya empleó a los excelentes caballeros Alani en Gran Bretaña.
En la batalla de Pollenzo los caballeros sármatas se enfrentaron a los visigodos en las filas de las tropas del extenuado Imperio. Como recompensa por estos servicios, los alanos llegaron a establecerse en algunos centros del norte de Italia en el Tanaro creando sartorio.
El valor guerrero de los sármatas estaba concentrado en caballería: se dividían en caballeros ligeros (arqueros a caballo) y caballeros catafractos: la caballería pesada equipada con armaduras formadas por escamas metálicas y una lanza de largo impacto. Algunos historiadores y el mismo Pius Filippani-Ronconi ven en la caballería catafracta de los alani-sármatas incluso la premisa logística de lo que será la caballería feudal de la Europa medieval.
Poco después de los varegos de la Rus, los sármatas también se convirtieron al cristianismo ortodoxo.
Sufrieron la onda expansiva de los mongoles y se convirtieron en un pueblo tributario. Luego tuvieron que sufrir el expansionismo turco y generalmente islámico: asimilaron algunos rasgos de esas culturas, pero mantuvieron firme la fe ortodoxa.
Curiosamente, los sármatas todavía existen son los osetios de las dos repúblicas del norte y del sur.
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