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Patente de corso al PP

 Cuando se acabó el recuento de votos la noche del 28 de mayo, muchos nos quedamos mirando la nada incapaces de reaccionar, de hablar del asunto, de analizar o de entender.

¿Qué nos pasa  a los súbditos de Felipe V, el Preparao? ¿Por qué premiamos la corrupción, el chabacanismo, lo bufonesco, la caricatura, el suicidio colectivo? 

 Todavía las imágenes de la pesadilla obstaculizan algo que es indispensable para no asfixiarnos definitivamente: el pensamiento crítico.

 Pensamos, cuando vimos el mapa lleno de borrones azules,  en esos seis meses que faltaban hasta las elecciones de diciembre, seis meses de acoso y derribo al gobierno, envalentonados los fascistas más recalcitrantes y los fieles al PP por cuestión de vísceras y de prepotencia, ya son imparables. 

Ver a  Feijóo, Ayuso y Almeida en el balcón de Génova eufóricos fue como comer estropajo de aluminio. Ver a Abascal  sacando su pecho de español muy español frente a los terroristas de Bildu soñando con las coaliciones que él y sólo él tenía entre sus manos y eso es mucho poder era como acompañar el estropajo con un trago de ácido sulfúrico. 

  España reaccionaba contra el sanchismo que se había entregados a los comunistas de Podemos y a los terroristas de Bildu y a los independentistas de ER,

  El discurso barato y machacón de  España, ETA, okupas, herencias, toros, caza y niños trans encontró su hueco en las visceras de los españoles formados en largos años de belenestebanismo.

  El PSOE se ha dado cuenta que aunque ha perdido el Gobierno de las comunidades autónomas, solo ha permanecido en tres y en las grandes ciudades, los votos no han  bajado demasiado, que su electorado es fiel. Quienes han abandonado han sido los votantes de Podemos y ahí es donde el va a centrar su campaña en pedir que no se divida el voto, en contar, y tristemente es verdad, que Podemos está muerto porque se ha dividido en grupúsculos que no tienen futuro alguno en las elecciones. El PSOE va a lo que se veía venir, a la recuperación del bipartidismo una vez eliminado Ciudadanos por parte de la derecha solo hay que dar la estocada a Podemos por la derecha. VOX es parte del bipartidismo es PP y siempre ha sido PP, VOX es el poli malo del PP el que siemrpe ha estado dentro pero no se le permitía decir tanto  hasta bajo la marca PP que para ampliar su espectro social se vendía como de centro derecha.

Unidas Podemos se ha hundido y ha desaparecido de los parlamentos de la Comunidad Valenciana y de Canarias y donde ha resistido lo ha hecho como algo casi simbólico.

En Madrid cuyo moderado objetivo era evitar la mayoría absoluta de Ayuso se han quedado fuera.

 No ha habido un cambio de España hacia la derecha, han votado al PP y VOX los que les votan siempre, pero la gente que votó Podemos no ha ido a votar a nadie. 

 Pedro Sánchez hizo una jugada maestra para evitar la sangría que le esperaba ante la euforia ilimitada del PP y para capitalizar el voto perdido de Podemos convirtiéndolo en voto útil al PSOE

  Podemos se enfrenta a su desaparición o a su permanencia en formaciones de coalición y lo que era imposible antes del 28 de mayo se hace imprescindible después. No hay tiempo, en eso el PSOE ha sido un buen tahur también. Quien realmente va con todas las cartas debajo de la manga es Pedro que ha conseguido impedir el ataque y derribo del PP y obligar a las fuerzas de izquierda a confluir en Sumar, con su favorita  Yolanda Diaz a la cabeza, en un tiempo exprés.

  Todavía si Sumar logra agrupar todos los votos de las formaciones a la izquierda del PSOE se podría evitar que el PP y VOX obtengan la mayoría absoluta  y conseguir que el gobierno de coalición continue cuatro años más. 

  Izquierda Unida ya ha hecho su llamada  a la izquierda a confluir con Sumar como "la mejor oportunidad" para "ganar las elecciones generales", Podemos anuncia que van en coalición con Sumar,  Más Madrid no le pone líneas rojas y Compromis ya negocia listas  Las mareas gallegas buscan recomponerse en el partido de Yolanda. Los comunes también se apuntan a la nave que trata de reunificar los votos  a la izquierda del PSOE Solo le queda Adelante Andalucía para formar el gran grupo que lleve juntos a todos los grupúsculos surgidos de la gran ilusión inicial de Podemos y los salve de su quema definitiva.

No es necesario pensar igual en todo, se trata de  trabajar juntos y dejar atras los egos y el pablismo.  La ‘unidad popular’ no garantiza que el Gobierno de coalición pueda continuar, pero es indispensable para que pueda hacerlo.

  La cuestión radica en si es mejor un gobierno del PP con ruido en las calles que es donde  se luchan los problemas o un gobierno moderado del PSOE con la calle doblegada a  la publicidad machacona de "el gobierno más progresista de nuestra historia" 

Es demasiado duro ver al PP eufórico y envalentonado, seguro de que haga lo que haga, por muy atroz y espantoso que sea, no será castigada en las urnas. Este voto del 28 de mayo ha sidlo la  patente de corso a un puñado de delicuentes. 

  

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