El ministro de Defensa del Reino Unido, Ben Wallace, voló secretamente hace unos días a Washington "para solicitar apoyo de Biden en su propuesta para suceder a Liz Truss"
Pero Liz Truss ya tenía sucesor. Por lo que hay otra explicación mucho más plausible: Ucrania.
Biden tiene que estar seguro que el elegido seguirá las líneas correctas respecto a la guerra.
Londres se esté hundiendo en el caos y los líderes de las facciones del Partido Conservador corren como pollos sin cabeza para encontrar el sustituto adecuado para evitar unas elecciones que saben perdidas.
La economía británica se está desintegrando: el Ministro de Hacienda, Jeremy Hunt, dijo que hay que recortar el presupuesto de defensa no porque quieran sino porque no hay libras esterlinas.
El gran socio belicista de Biden está en descenso y caida libre y el estado profundo de Kiev no ve fluir las armas y los dólares como le gustaría
Rusia informó que Washington ha exigido al presidente Zelensky una actuación espectacular en el campo de batalla, ya que las elecciones en Estados Unidos el 8 de noviembre están a la vuelta de la esquina
Biden emitió una declaración sobre la salida de Truss, en la que afirmó que EE. UU. y el Reino Unido son aliados fuertes y amigos duraderos, y ese hecho nunca cambiara; es decir, espera que presenten un nuevo Primer Ministro que se adhiera fielmente a la agenda establecida por Boris Johnson en Ucrania.
El objetivo actual de Estados Unidos de cara a ese gran golpe electoral es Kherson ( Jersón) la ciudad estratégica del sur de Ucrania, bajo control ruso desde el inicio de la guerra.
La OTAN lleva exigiendo durante mucho tiempo al régimen de Kiev operaciones ofensivas contra esta ciudad, independientemente de las bajas y Zelensky, obediente, está intentando arrebatar el control de la ciudad, según reconoce el general del ejército Sergei Surovikin, el recién nombrado comandante para las operaciones de Ucrania.
Surovikin informó sobre la posibilidad de que el régimen de Kiev utilice métodos de guerra prohibidos y de la necesidad de organizar y garantizar la salida segura de los ciudadanos.
"Actuaremos consciente y oportunamente, sin excluir decisiones difíciles" " El enemigo no renuncia a intentar atacar las posiciones de las tropas rusas. Esto se refiere, en primer lugar, a las direcciones Kupyansk (oblast de Kharkov), Krasnolimansky (oblast de Donetsk) y Mykolaiv-Krivoy Rog (oblast vecina de Kherson). Nuestro enemigo es un régimen criminal que está matando a los ciudadanos de Ucrania. Somos un solo pueblo con los ucranianos y deseamos que Ucrania se convierta en un estado independiente de Occidente y de la OTAN, amigo de Rusia"
Es decir que los parámetros establecidos de las operaciones militares especiales con enfoque en la "desmilitarización" y la "desnazificación" se mantienen sin cambios, al mismo tiempo que apuntan al reemplazo del régimen de Zelensky.
Rusia está observando no solo la necesidad del gran golpe de Biden mediante su mecano Zelensky, a la vez que no le quita el ojo de encima al gran director de orquesta en las operaciones contra Rusia desde la II Guerra Mundial: Gran Bretaña, hoy hundida en una profunda crisis económica y política que podría erosionar el firme apoyo del Reino Unido al regimen suicida de Zelensky.
El país está empantanado en un atolladero interno, pero el nuevo Primer Ministro , Rishi Sunat melegido en el partido tory ya lo ha comunicado a la prensa "Todo nuestro apoyo a Volodomir Zelensky"
La pregunta es ¿va a usar la fortuna personal de su esposa? Porque Gran Bretaña está en quiebra.
Comentarios
Publicar un comentario